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Recomendaciones para personas con Pectus Excavatum

Conclusiones y recomendaciones

6.1. Conclusiones

El pectus excavatum es la anomalía más común de la pared torácica anterior, y aunque en muchos casos se manifiesta como una preocupación estética, su impacto funcional y psicológico puede ser significativo. A lo largo de esta investigación, se ha evidenciado que el vacuum bell constituye una alternativa terapéutica válida, segura y efectiva en casos cuidadosamente seleccionados.

Los hallazgos principales de esta tesis pueden resumirse de la siguiente manera:

  1. El vacuum bell permite la corrección no invasiva de deformidades torácicas leves a moderadas, especialmente en pacientes pediátricos con tórax flexible.
  2. Su eficacia está directamente relacionada con la edad de inicio, la profundidad de la deformidad, la flexibilidad torácica y la adherencia al tratamiento diario.
  3. Aunque no reemplaza a la cirugía en casos severos, puede evitarla o retrasarla en un porcentaje significativo de pacientes.
  4. Presenta una baja tasa de complicaciones, generalmente limitadas a efectos locales leves y transitorios.
  5. La falta de protocolos estandarizados y estudios a largo plazo limitan actualmente su implementación sistemática a gran escala.
  6. Su uso puede extenderse como herramienta de preparación prequirúrgica o soporte postoperatorio en pacientes que se someten a cirugía correctiva.

En conjunto, estos hallazgos validan el uso del vacuum bell como una opción terapéutica legítima en el manejo del pectus excavatum, siempre que se respeten criterios clínicos de inclusión y se garantice un acompañamiento médico riguroso.


6.2. Recomendaciones

Con base en la revisión bibliográfica y el análisis comparativo realizado, se proponen las siguientes recomendaciones para la práctica clínica y la investigación futura:

Para la práctica médica:

  • Establecer criterios clínicos claros para la selección de candidatos al tratamiento con vacuum bell.
  • Implementar protocolos de seguimiento estandarizados, incluyendo evaluación periódica por imágenes, seguimiento psicológico y fisioterapia complementaria.
  • Fomentar la educación del paciente y la familia para garantizar una adherencia adecuada al tratamiento.
  • Incorporar el vacuum bell como primera línea terapéutica en pacientes pediátricos con deformidades leves a moderadas.
  • Considerar su uso combinado con cirugía en contextos donde se desee disminuir la severidad preoperatoria o mantener resultados postoperatorios.

Para la investigación futura:

  • Desarrollar estudios multicéntricos con seguimiento longitudinal ≥ 5 años, que evalúen la estabilidad de los resultados y posibles recurrencias.
  • Establecer biomarcadores de respuesta al tratamiento, como indicadores fisiológicos, anatómicos o genéticos.
  • Comparar de forma sistemática la satisfacción del paciente y calidad de vida entre quienes usan VB y quienes son tratados quirúrgicamente.
  • Evaluar el impacto económico del vacuum bell frente a la cirugía, especialmente en sistemas de salud pública.

Concluimos así que el vacuum bell no solo representa una oportunidad terapéutica conservadora para muchos pacientes con pectus excavatum, sino también un ejemplo del impacto positivo que puede tener la medicina mínimamente invasiva en el tratamiento de malformaciones estructurales del cuerpo humano.

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