Introducción: El pectus excavatum no solo afecta la apariencia del pecho, sino que también tiene un impacto significativo en la postura. La deformidad en el esternón puede alterar la alineación de los hombros y la columna vertebral, llevando a problemas de postura como la caída de los hombros y una curvatura anormal de la espalda.

Cómo el pectus excavatum afecta la postura: La forma hundida del pecho puede llevar a un desequilibrio en la musculatura del torso, causando que los hombros se caigan hacia adelante. Esto, a su vez, puede provocar tensiones en el cuello, la espalda y otras áreas del cuerpo.

Ejercicios y técnicas para mejorar la postura:

Ejercicios de fortalecimiento de la espalda: Realizar ejercicios que fortalezcan la musculatura de la espalda superior y el core puede ayudar a mejorar la alineación postural.
Estiramientos y yoga: La práctica de yoga y estiramientos para abrir el pecho y fortalecer los músculos de la parte superior de la espalda puede aliviar la tensión y mejorar la postura.
Terapia física: Trabajar con un fisioterapeuta especializado en postura puede ser una excelente opción para desarrollar un plan personalizado de ejercicios.

Conclusión: Mejorar la postura en personas con pectus excavatum no solo tiene beneficios estéticos, sino también funcionales. Al practicar ejercicios específicos y tomar conciencia de la importancia de la postura, puedes aliviar las tensiones musculares y mejorar tu bienestar general.